Casi un centenar de personas se reunieron el día 29 de mayo en el Maule para abordar la gestión del riesgo de desastres, destacando el rol fundamental de las comunidades en la materia.
Con un notable éxito y una masiva convocatoria, se llevó a cabo el seminario «Reducción del Riesgo de Incendios Forestales: Hacia una Gestión Territorial del Riesgo” en el Liceo Bicentenario de la Inmaculada Concepción, en Cauquenes, Región del Maule. El evento congregó a cerca de 100 participantes, incluyendo autoridades, representantes municipales, organizaciones sociales, expertos, dirigentes y vecinos de diversas localidades, todos unidos por el propósito de informarse y ser parte de un espacio de reflexión y construcción colectiva. La jornada, marcada por casos de éxito en prevención y valiosos testimonios, fue una instancia crucial para fortalecer la cultura preventiva frente a una amenaza cada vez más presente en el país.
El seminario, una iniciativa conjunta de Cáritas Chile, Cáritas Linares, la Universidad Católica del Maule y la Red de Prevención Comunitaria, nació de la urgencia que imponen los incendios forestales, cuya frecuencia e intensidad han aumentado significativamente. Más allá de ser un fenómeno climático o técnico, se reconoció que estos eventos interpelan nuestras formas de habitar, de cuidar el entorno y de construir comunidad. Por ello, la ponencia se centró en avanzar hacia una mirada integral de la gestión del riesgo, donde la voz de las instituciones, los saberes académicos y, fundamentalmente, la experiencia viva de las comunidades son los pilares para afrontar estos desafíos. Este encuentro fue una oportunidad invaluable para compartir aprendizajes, tejer redes de colaboración y, en definitiva, fortalecer una cultura de prevención con un enfoque humano, solidario y participativo, impulsando un Chile más resiliente y comprometido con la vida.
La jornada se estructuró en tres paneles temáticos que permitieron una visión integral del desafío. El primer panel, «La Gestión del Riesgo de Desastre: La mirada institucional y académica», abordó cómo la articulación intersectorial es fundamental para fortalecer las estrategias de prevención. En este espacio, se destacó la evolución de Chile hacia una comprensión más amplia e integrada del riesgo, reconociendo que la prevención es una labor social, política y territorial. Expertos como Alejandro Boettiger Navarrete (Jefe del Departamento de Reducción del Riesgo de Desastres de SENAPRED Maule), Marcelo Rodríguez Crespillo (Jefe del Departamento de Protección Contra Incendios Forestales en la región del Maule de CONAF) y Carmen Bravo Castillo (Departamento de Ciencias Forestales, Universidad Católica del Maule) compartieron sus conocimientos y experiencias, subrayando el rol clave de las instituciones públicas, la academia y las redes estratégicas en el diseño de estrategias preventivas que consideren las particularidades y vulnerabilidades locales.
El segundo panel, «Experiencias comunitarias en prevención de incendios forestales», puso el foco en las valiosas iniciativas impulsadas por comunidades locales. En un contexto desafiante, marcado por el cambio climático y la expansión urbana, estas experiencias demostraron que la prevención es posible cuando las personas asumen un rol protagónico y se construyen confianzas entre los diversos actores. Maricel Riquelme (Presidenta del Comité Local comunidad Nirivilo, San Javier), Andrea Cancino (Presidenta del comité local de la comunidad Coihueco, Chanco) y Rosario Núñez (referente del comité Tapihue, Cauquenes) compartieron sus buenas prácticas y aprendizajes, evidenciando cómo, con organización y coordinación, las comunidades pueden fortalecer sus sistemas de alerta y reducir significativamente los riesgos de desastres.
Finalmente, la «Mesa de diálogo: Horizontes para una cultura de la prevención» reunió a representantes de los paneles anteriores, incluyendo a Myriam Mellado (Red de Prevención) y Eduardo Aravena (Caritas Linares), para proyectar caminos comunes hacia un país más resiliente. Este espacio de diálogo intersectorial reforzó la idea de que la reducción del riesgo de desastres no es una tarea de un solo sector, sino que requiere una coordinación constante, participación activa, voluntad política y una visión a largo plazo para construir una cultura de prevención arraigada en la comunidad.
Fuente: Caritas Chile
Comments are closed